viernes, 9 de marzo de 2007

Senderos de lluvia y maravilla

Escucho la voz rasposa de una mujer que celebra el desamor gracias a mi nueva adquisición de La Casa de la Trova y eso me hace sentir bien, un resquicio de felicidad en medio de esta metrópoli que languidece bajo la lluvia.
Es viernes y la Ibero está sumergida en el sopor. Y yo aquí, aislada en la pantalla, tomo un taller de periodismo digital mientras los recuerdos aparecen sueltos, en torbellino, no soy capaz de asir alguno...mejor, me parece.
En fin, que en algún universo paralelo estoy viendo una película por primera vez (Réquiem por un Sueño, El Libro de Cabecera, el documental de Buena Vista Social Club) y la vida parece mostrar un sinfín de caminos nuevos, vitales, llenos de misterios y maravillas por descubrir.
"En aquél entonces no fui consciente de la multitud de caminos que se me presentaban aquella mañana en Dorotea", multitud de ciudades invisibles que
aún aguardan el sonido de mis pasos.