lunes, 12 de marzo de 2007

Esa absurda belleza

Como sostuvo Foucault, las utopías consuelan. Si no tienen un lugar real se desarrollan en un espacio maravilloso y liso; despliegan ciudades de amplias avenidas, jardines bien dispuestos, comarcas fáciles, aun si su acceso es quimérico.

Siempre, siempre, hay espacio para las bellas aventuras.